Hoy más que nunca quisiera, poder borrar
toda tristeza que te hace daño, cada preocupación, realidades, situaciones que puedan afligir tu
alma. Hoy más que nunca quisiera tener línea directa al Cielo, audiencia con
Dios, hincarme a sus pies, elevar mi ruego en oración interminable, sentida,
escuchada, concedida… Hoy más que nunca quisiera, ser el puente, frágil, diminuto,
inmenso, y llegar a Él...
©María del Carmen Menéndez García
MACARENA